Cáncer de Pulmón
Last Updated 05/19/2020
Author:The CHEST Foundation

Descripción general del Cáncer de Pulmón
- El Cáncer de Pulmón es el segundo tipo de cáncer más común entre hombres y mujeres.
- El carcinoma broncopulmonar no microcítico (CBPNM) representa entre un 80 % y un 90 % de todos los casos de Cáncer de Pulmón cada año.
- El carcinoma microcítico de pulmón (CMP) representa entre un 10 % y un 20 % de todos los casos de Cáncer de Pulmón cada año.
- Fumar es la primera causa de Cáncer de Pulmón.
El Cáncer de Pulmónn es el segundo tipo de cáncer más común entre hombres y mujeres. Cáncer se refiere al proceso en el que células anormales crecen de manera incontrolada. Es difícil diagnosticar el Cáncer de Pulmón en sus estadios iniciales, por lo que es importante consultar a un neumólogo —médico especialmente preparado para diagnosticar y tratar las enfermedades pulmonares— tan pronto como sospeche alguna dolencia. Tras un diagnóstico de Cáncer de Pulmón, su neumólogo formará un equipo de especialistas para que usted tenga la gama completa de las opciones de tratamiento más recientes. Juntos, estos expertos médicos pueden determinar cuál es la mejor manera de tratar su tipo de cáncer específico.
Cómo afecta el Cáncer de Pulmón al cuerpo
Distintos tipos de Cáncer de Pulmón a menudo afectan al cuerpo de manera diferente. El tratamiento se basa en el tipo de cáncer y en el estadio del cáncer. El estadio se refiere a qué tan generalizado está el cáncer en el cuerpo. ¿Está en un área del pulmón o se ha diseminado? La estadificación es fundamental porque los tratamientos pueden variar según el estadio.
El estadio de su Cáncer de Pulmón también afecta el resultado previsto de la enfermedad, su pronóstico. Las personas que padecen cáncer en estadios iniciales, en los que el cáncer está más localizado, tienden a tener mejores resultados que las personas que padecen cáncer en estadios avanzados.
Entendiendo dónde está el cáncer y cómo y a dónde se disemina, su equipo de profesionales médicos puede crearle un plan de tratamiento especializado.
El CBPNM representa entre un 80 % y un 90 % de todos los casos de Cáncer de Pulmón cada año. Hay tres tipos de CBPNM:
- Adenocarcinoma, el tipo más común de CBPNM
- Carcinoma escamoso, que representa alrededor de un 25 % de los casos de CBPNM
- Carcinoma de células grandes, que representa alrededor de un 10 % de los casos de CBPNM
El CMP representa entre un 10 % y un 20 % de todos los casos de Cáncer de Pulmón cada año. Los tumores del CMP tienden a crecer más rápidamente que los tumores del CBPNM. Al principio, estos tumores podrían ser más sensibles a la quimioterapia.
¿Qué causa el Cáncer de Pulmón?
Tabaquismo
Fumar continúa siendo la primera causa de Cáncer de Pulmón. De hecho, fumar también es la causa de muchos tipos de cáncer. La Sociedad Estadounidense contra el Cáncer estima que entre un 80 % y un 85 % de todos los casos de cáncer de pulmón en Estados Unidos se vinculan al tabaquismo, y esto incluye a las personas que han dejado de fumar.
Cualquier tipo de tabaquismo parece aumentar el riesgo de padecer cáncer de pulmón. Cigarrillos, cigarros y pipas, todos se han vinculado al cáncer de pulmón. Fumar marihuana también puede aumentar el riesgo, especialmente en los jóvenes. La exposición al tabaquismo pasivo también aumenta el riesgo. Se estima que el tabaquismo pasivo causa más de 3,000 muertes por cáncer de pulmón cada año entre los adultos que no fuman.
Causas genéticas
Los investigadores están descubriendo que ciertas mutaciones genéticas se vinculan al cáncer de pulmón. Las mutaciones son cambios en los genes que hacen que funcionen de manera distinta a sus versiones “normales”. Las personas que tienen esos genes mutados podrían ser más propensas a padecer cáncer de pulmón. Tener uno de estos genes podría ser una razón por la que personas que no fuman contraen cáncer de pulmón.
Otras causas
Otras sustancias nocivas pueden causar cáncer de pulmón, como el radón o el asbesto. El radón es un gas natural inodoro, insípido, invisible y radiactivo. Las personas que han estado expuestas a altos niveles de radón son más propensas a contraer cáncer de pulmón. De hecho, la exposición al radón es la causa principal de cáncer de pulmón en personas que no fuman.
La exposición al asbesto, sustancia mineral que antes se usaba en aplicaciones de aislamiento y construcción, puede causar cáncer de pulmón, especialmente en las personas que fuman. La contaminación del aire también se ha vinculado al cáncer de pulmón.
Síntomas del Cáncer De Pulmón
En sus estadios iniciales, el cáncer de pulmón por lo general no tiene síntomas perceptibles. En muchas ocasiones se descubre con posterioridad. Aun así, hay buenas opciones de tratamiento disponibles. A veces, el cáncer de pulmón aparece en una radiografía de tórax; en una tomografía axial computarizada (TAC); o en una prueba que se hace para otro fin, como para una infección pulmonar. Los neumólogos desempeñan un papel clave en el diagnóstico temprano, la estadificación y el tratamiento de cáncer de pulmón.
Los síntomas del cáncer de pulmón pueden afectar a todo el cuerpo. Una tos y dificultad para respirar constantes son los síntomas más comunes, pero algunas personas también presentan lo siguiente:
- expectoración de sangre
- sienten dolor torácico, de hombro o de espalda
- notan cambios en la voz, especialmente ronquera
- tienen infecciones pulmonares recurrentes (como neumonía o bronquitis)
- dificultad al tragar
A veces, el cáncer de pulmón se disemina más allá de los pulmones a otras partes del cuerpo. Los síntomas que se pueden presentar cuando el cáncer de pulmón se ha diseminado incluyen, por ejemplo:
- debilidad
- cansancio
- pérdida de peso sin causa aparente
- dolor en los huesos o las articulaciones
- huesos fracturados sin causa aparente
- dolores de cabeza
- coágulos sanguíneos
- movimientos inestables o convulsiones
- pérdida de memoria
- hinchazón en el cuello o la cara
Hable con su médico acerca de cualquier síntoma que reincida o sea raro. Todas las personas tosen a veces, pero una tos constante —especialmente con otros síntomas, como sangre en la mucosidad o dolor sin causa aparente— siempre debería examinarse. Como todos los cánceres, el cáncer de pulmón se puede tratar mejor cuando se detecta tempranamente.
Muchos síntomas del cáncer de pulmón no son específicos. Pueden ser a consecuencia de otras afecciones médicas no relacionadas con el cáncer de pulmón. Por ejemplo, las personas que padecen enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) pueden tener tos crónica e infecciones recurrentes. Consulte a su médico para obtener un diagnóstico exacto si tiene alguno de estos síntomas.
Cuáles son los factores de riesgo de padecer Cáncer de Pulmón
Fumar es el factor individual de riesgo más grande de contraer cáncer de pulmón. La exposición frecuente al tabaquismo pasivo también aumenta el riesgo. El riesgo de contraer cáncer de pulmón parece depender de la dosis —es decir, mientras más se fuma (más cigarrillos, por más años), mayor es el riesgo. Las investigaciones comprueban que dejar de fumar en cualquier momento de su vida disminuye el riesgo.
Otros factores de riesgo de contraer cáncer de pulmón incluyen, por ejemplo:
- Antecedentes de cáncer en otras partes del cuerpo: las personas con antecedentes de cáncer de cabeza y cuello o cáncer esofágico, ambos asociados con el tabaquismo, corren un mayor riesgo de contraer cáncer de pulmón. Las personas que han padecido cáncer de mama, colon o próstata también corren un alto riesgo.
- Edad: el riesgo de contraer cáncer de pulmón aumenta con la edad. Únicamente alrededor de un 10 % de los casos ocurren en personas menores de 50 años de edad.
- Antecedentes familiares: si alguno de sus padres o hermanos ha padecido cáncer de pulmón, su riesgo puede aumentar.
- Radioterapia previa: la radiación es un tratamiento importante de cáncer. No obstante, la radiación en el área torácica, especialmente para el tratamiento de otro tipo de cáncer, parece aumentar el riesgo de padecer cáncer de pulmón.
- Exposición a radón, asbesto o químicos industriales: el radón, el asbesto, el arsénico, el berilio y el uranio han sido vinculados al cáncer de pulmón. Si usted ha trabajado con estas sustancias tóxicas, podría tener un alto riesgo de contraer cáncer de pulmón.
- Otras enfermedades pulmonares: la EPOC, la enfermedad pulmonar intersticial y la tuberculosis podrían aumentar el riesgo de contraer cáncer de pulmón. También es posible que la cicatrización de los pulmones a causa de otras enfermedades sea propicio para que aparezca un cáncer de pulmón.
Tener más de un factor de riesgo aumenta sus probabilidades de contraer cáncer de pulmón. Un fumador expuesto al asbesto es 4 veces más propenso a contraer cáncer de pulmón que un fumador que no está expuesto a este mineral. Es una propensión 80 veces mayor en comparación con una persona que nunca ha fumado ni ha estado expuesta al asbesto.
Diagnóstico del Cáncer De Pulmón
Si usted corre un alto riesgo de contraer Cáncer de Pulmón, consulte a su médico acerca de pruebas de detección con una TAC torácica de baja dosis. Su médico puede hablarle acerca de los riesgos y las ventajas de la tomografía. Las TAC torácicas no detectan todos los cánceres de pulmón. A veces hasta puede suscitar falsas alarmas. Pero si la prueba de detección muestra algo sospechoso, es probable que su médico desee repetir la tomografía inmediatamente o después de varios meses para comprobar si las anomalías han desaparecido o cambiado.
El cáncer de pulmón tiene el índice de sobrevivencia de 5 años más bajo de todos los cánceres comunes, pero el índice de sobrevivencia es superior a un 50 % cuando el cáncer se detecta en un estadio inicial y se limita a un área del pulmón. Por eso la detección temprana es de suma importancia.
Con el fin de diagnosticar el cáncer, su equipo de médicos profesionales tiene que abordar tres problemas principales:
- ¿De qué tipo de cáncer de pulmón se trata?
- ¿Dónde está localizado?
- ¿Qué se debe hacer al respecto?
Es importante contestar las primeras dos preguntas tan pronto como sea posible. Las pruebas para encontrar las respuestas tienen que hacerse correctamente, lo que significa que podrían tardar un poco más. El plan de tratamiento que más le convenga a usted dependerá de la exactitud del diagnóstico de su cáncer.
Su equipo de profesionales médicos le hará muchas preguntas acerca de su salud. Tomarán todos sus antecedentes médicos. También le harán un examen físico. Le ordenarán pruebas para averiguar cuál es la causa de sus síntomas. Si las pruebas sugieren que se trata de cáncer, ordenarán más pruebas. Los resultados de las pruebas ayudan a su equipo de profesionales médicos a obtener un diagnóstico y un estadio exactos. Ellos son las únicas personas que pueden elaborarle un plan de tratamiento.
Su consulta
Ya sea si usted acudirá a una cita con un médico de cabecera o un oncólogo, prepárese para su consulta. Considere pedir a un amigo o ser querido que lo acompañe a la cita. Esta persona podría recordar detalles de la consulta que usted después olvide o malinterprete. Algunas personas graban sus citas con un teléfono móvil o una grabadora de audio. Tome notas durante su consulta. Traiga preguntas acerca de cualquier diagnóstico o información del tratamiento que podrían causarle confusión.
Su equipo de profesionales médicos querrá saber tanto como sea posible acerca de sus síntomas, salud general y antecedentes médicos. Antes de su cita, recopile lo siguiente:
- Información acerca de sus síntomas: ¿Qué síntomas están presentes? ¿Cuándo comenzaron? ¿Han cambiado? ¿Ha notado síntomas nuevos? ¿Hay algo que alivie sus síntomas? ¿Hay algo que empeore sus síntomas?
- Información sobre el tabaquismo: es importante tener una descripción completa de los hábitos de fumar. ¿Ha fumado alguna vez? De ser afirmativo, ¿cuándo comenzó? ¿Cuántas cajetillas de cigarrillos fumaba por lo regular en un día o una semana? ¿Por cuánto tiempo fumó? Si dejó de fumar, ¿cuándo lo hizo?
- Antecedentes laborales: también es importante llevar una descripción completa de sus trabajos, incluso si tuvo el trabajo hace muchos años.
- Lista completa de medicamentos, suplementos y vitaminas que toma: incluya todos los medicamentos de venta con y sin prescripción y suplementos, incluyendo plantas medicinales y remedios naturales. Si es posible, traiga los frascos consigo. Así, su médico puede comprobar con exactitud lo que toma.
- Sus antecedentes médicos: ¿Ha padecido cáncer alguna vez? ¿De qué tipo? ¿Qué tratamiento recibió? Su médico querrá saber acerca de cualquier afección pulmonar o respiratoria que haya padecido. Si usted tiene antecedentes médicos en otro consultorio, solicite que envíen copias a su neumólogo.
- Expedientes clínicos: traiga todos sus expedientes clínicos, especialmente cualquier copia de radiografías de tórax. Comparar las radiografías actuales con la previas le indica a su médico la probabilidad de cáncer de pulmón. Estos expedientes ayudan a su médico a determinar qué pruebas se necesitan. Si algún tejido sospechoso ha estado presente por varios años sin ningún cambio, probablemente no es cáncer de pulmón.
- Antecedentes médicos familiares: ¿Se le ha diagnosticado cáncer de pulmón a algún familiar? ¿Hay algún familiar que tenga antecedentes de afecciones pulmonares o respiratorias?
- Preguntas: escriba sus preguntas para que no se le olvide hacerlas durante su cita.
Pruebas y diagnósticos
Se puede recurrir a muchas pruebas para detectar y averiguar más sobre alguna anomalía encontrada durante una cita:
- Radiografías de tórax: una radiografía de tórax es indolora. Los médicos examinan los pulmones y las vías respiratorias. Las radiografías de tórax pueden mostrar manchas (nódulos) u otras áreas anómalas. No hay forma de saber con una radiografía si alguna es cancerosa, pero si su radiografía de tórax indica algo sospechoso, su médico puede ordenar más pruebas.
- TAC: una TAC se vale de la radiografía para trazar imágenes transversales. Estas imágenes ofrecen más detalles sobre el tamaño y el lugar de las anomalías encontradas en una radiografía de tórax.
- Tomografía por emisión de positrones (TEP): en esta prueba, se inyecta una forma radiactiva de azúcar en el torrente sanguíneo. Una TEP arroja datos sobre si algo detectado en una TAC es metabólicamente activo (es decir, si está cambiando o creciendo). Las TEP puede indicar si un tumor se está diseminando desde el sitio original a otras partes del cuerpo.
- Broncoscopia: un broncoscopio es una sonda delgada y flexible que tiene una videocámara pequeña. La sonda se introduce a través de la nariz o la boca. Pasa por la tráquea hacia los pulmones. La broncoscopia le permite al médico, usualmente un neumólogo o un cirujano torácico, explorar dentro de las vías respiratorias. El médico también puede extraer pequeñas muestras de tejido (biopsias) y muestras de líquidos, y luego enviarlas a un laboratorio para comprobar si hay presencia de cáncer.
- Broncoscopia de navegación: este tipo de broncoscopia usa un sistema similar al GPS para localizar y biopsiar nódulos pulmonares de manera segura y exacta, lo que no se puede lograr con una broncoscopia convencional.
- Ecografía endobronquial: esta prueba a veces se usa durante una broncoscopia. No solamente diagnostica el cáncer de pulmón, sino que también puede comprobar si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos (lo que es importante para estadificar el cáncer). El broncoscopio tiene en un extremo una sonda de onda sonora. Los médicos pueden localizar y ver tumores y ganglios linfáticos al lado de la vía respiratoria, pero no dentro del pulmón. Los médicos luego usan agujas para biopsiar el tumor o el ganglio linfático y comprobar si hay presencia de cáncer. La ecografía endobronquial no se ofrece en todos los hospitales y centros médicos.
- Biopsia por punción: si en la TAC aparece un tumor o nódulo sospechoso, un radiólogo —es decir, un médico que se especializa en radiología o en diagnósticos que se basan en técnicas radiactivas— puede usar una TAC para biopsiar la anomalía. Las muestras se pueden tomar con agujas pequeñas o grandes para obtener suficiente material de diagnóstico.
- Biopsia pulmonar quirúrgica: dependiendo del lugar donde se encuentre la supuesta anomalía o tumor, a veces una intervención quirúrgica es la mejor manera de extraer una buena muestra de tejido.
- Toracocentesis guiado por ecografía: esta prueba se puede hacer si se ha acumulado algún líquido anómalo entre la pared torácica y el pulmón, un área conocida como pleura. (Un derrame pleural también describe la acumulación de líquido en la pleura.) En esta prueba, el líquido se encuentra en tiempo real con un ecógrafo. El médico marca la piel en el tórax, y luego anestesia el área. Él o ella introduce una aguja en el espacio alrededor del pulmón y extrae líquido. El líquido posteriormente se envía a un laboratorio para comprobar la presencia de cáncer.
- Toracoscopia médica: esta prueba se puede hacer para biopsiar la capa interior del tórax, llamada la pleura. Esta prueba se usa cuando la toracocentesis no arroja ningún diagnóstico. La toracoscopia médica se realiza bajo los efectos de anestesia y la guía de un ecógrafo. Se introduce una cámara pequeña en la cavidad torácica para inspeccionar y biopsiar la pleura. La prueba es segura y exacta. Los pacientes pueden volver a casa el mismo día. También es posible que la prueba alivie los síntomas de acumulación de líquido.
- Pruebas de biomarcadores: el tejido de un tumor obtenido por biopsia puede analizarse para identificar ciertas características de células cancerosas, o biomarcadores. Los biomarcadores dan información específica acerca del tumor y el cáncer de pulmón. Es importante que la información sea personalizada porque no todos los cánceres de pulmón son iguales. Las pruebas de biomarcadores ayudan a su médico a decidir qué tratamiento le conviene más.
Estas pruebas no solo identifican cáncer de pulmón, sino que también ayudan a determinar su estadio, información que le sirve a su equipo de profesionales médicos para planificar su tratamiento.
Tratamiento del Cáncer De Pulmón
El tratamiento del cáncer de pulmón depende del tipo y el estadio de dicho cáncer. Algunos de los tratamientos más comunes de cáncer de pulmón incluyen, por ejemplo:
- Operación quirúrgica: una intervención quirúrgica es la primera opción de tratamiento. Cada pulmón está dividido en secciones, llamadas lóbulos. El pulmón derecho tiene tres lóbulos: superior, medio e inferior. El pulmón izquierdo tiene solamente dos lóbulos: superior e inferior. Una intervención quirúrgica podría extirpar el cáncer. En estos casos, la intervención quirúrgica tiene la tasa de curación más alta.
- Quimioterapia: la quimioterapia usa medicamentos para matar las células cancerosas. La mayoría de los medicamentos quimioterapéuticos se administran directamente en las venas por vía intravenosa (i.v.). Algunos medicamentos quimioterapéuticos se consiguen en forma de cápsulas (quimioterapia oral). En el CBPNM avanzado, la quimioterapia puede usarse exclusivamente o con otros tratamientos oncológicos.
- La radioterapia (RT) —otro tipo de quimioterapia— es el tratamiento de preferencia para el CMP que se limita a un área específica del tórax. La radiación puede dirigirse de manera segura a un área específica.
- Radioterapia: la RT usa rayos X de alta energía u otras formas de radiación para matar las células cancerosas. Puede administrarse de varias formas. En la mayoría de los casos, el paciente se acuesta sobre una mesa especial de tratamiento. Un aparato emite rayos radiactivos invisibles a través de la piel hacia el cáncer.
- La radiación puede dañar los tejidos sanos. El equipo de radiación oncológica medirá y marcará cuidadosamente el punto para concentrar la radiación. Durante el tratamiento, los rayos se dirigirán a ese punto específico. Cada tratamiento dura solamente unos cuantos minutos.
- La radioterapia corporal estereotáctica (RTCE) concentra e intensifica cada dosis de radiación de manera que cause menos daño al tejido sano cerca del tumor. A lo largo del tratamiento, la fuerza y la dirección de la radiación se ajustan constantemente para que actúen sobre cualquier cambio en el tumor (como cuando se hace más pequeño) y evita dañar el tejido sano. La RTCE administra varias dosis, usualmente de 3 a 5 tratamientos (1 tratamiento al día).
- Inmunoterapia: esta es una terapia nueva en el tratamiento del CBPNM que usa medicamentos para fortalecer el sistema inmunitario. La inmunoterapia es un tipo de bioterapia que ayuda al cuerpo a combatir el cáncer mejorando la respuesta inmunitaria del cuerpo e impidiendo que los cánceres de pulmón se escapen de los efectos del sistema inmunitario. No se dirige directamente a las células cancerosas. En su lugar, capacita al sistema inmunitario a reconocer las células cancerosas, para que luego actúe selectivamente sobre ellas y las mate.
- Tratamientos dirigidos: el tratamiento oncológico dirigido se vale de medicamentos para atacar las células cancerosas, incluyendo algunos tipos de cánceres de pulmón. Los investigadores han llegado a más conclusiones acerca de los cambios en las células cancerosas. Se han producido medicamentos que actúan directamente sobre estos cambios. Estos medicamentos actúan sobre partes específicas de células y señales que ciertas proteínas envían a células, las cuales causan que crezcan y se dividan de manera incontrolada.
Su equipo de profesionales médicos discutirá estas opciones y determinará si son las adecuadas para su tipo de cáncer.
Efectos secundarios
No todas las personas sufren efectos secundarios por el tratamiento del cáncer de pulmón, y se han logrado avances en la producción de quimioterapias menos tóxicas. No obstante, algunos medicamentos quimioterapéuticos sí tienen algunos efectos secundarios graves, como, por ejemplo:
- cansancio
- náusea
- vómito
- pérdida de apetito
- debilidad
- caída del cabello
- llagas orales
- llagas en el área donde se ha aplicado el tratamiento de radiación
- disminución de inmunidad (resistencia a otras enfermedades)
- problemas de memoria
- dolor y malestar
- diarrea o estreñimiento
- erupciones cutáneas
Los efectos secundarios dependen de qué tratamientos reciba y cómo responda su cuerpo a estos.
Los efectos secundarios pueden mitigarse con medicamentos incluso antes de que empiece la quimioterapia. Por ejemplo, es común que el equipo de profesionales médicos le administre antieméticos (fármacos contra la náusea) antes de la quimioterapia. Consulte a su equipo de profesionales médicos acerca de los posibles efectos secundarios de su tratamiento. Pregunte qué puede hacer para ayudar a controlarlos. Informe cualquier efecto secundario a su equipo de profesionales médicos a lo largo de su tratamiento. No podrán ayudarle a sentirse mejor si no saben qué síntomas tiene.
Cómo convivir con Cáncer De Pulmón
No hay una cura mágica para el cáncer de pulmón, pero usted puede tomar medidas en casa para sentirse más aliviado y mejorar su salud general.
- Si fuma, deje de hacerlo. No es fácil dejar de fumar. Su equipo de profesionales médicos puede prescribirle medicamentos para que deje de fumar o remitirlo a clases locales o grupos de apoyo. Dejar de fumar lo mantendrá más saludable.
- Descanse mucho. El descanso reduce el estrés, aumenta los sentimientos de bienestar y es posible que fortalezca su sistema inmunitario (la habilidad natural del cuerpo de combatir enfermedades). Muchas personas sienten que el tratamiento del cáncer es agotador. Es posible que usted se sienta exhausto después de una quimioterapia o RT. Hágale caso a su cuerpo: descanse cuando se sienta agotado. Puede estar activo si se siente bien. La curación toma tiempo y energía.
- Manténgase activo y haga ejercicio. Es posible que no tenga ganas, pero hacer ejercicio es saludable. Los estudios demuestran que el ejercicio puede ayudar a reducir los síntomas y los efectos secundarios del cáncer de pulmón. También puede mejorar la calidad de vida. Hable con su equipo de profesionales médicos acerca de encontrar un programa seguro para usted. Trate de mantenerse activo todos los días, incluso si es una simple caminata.
- Consuma una dieta saludable. No es fácil comer bien. Es difícil comer algo si el tratamiento del cáncer afecta su apetito y sentido del gusto. Obtener suficientes calorías y nutrientes promueve la sanación. Infórmele a su equipo de profesionales médicos si comer se convierte en un desafío.
Su médico podría prescribirle medicamentos para estimular el apetito. Otros medicamentos alivian las llagas orales o calman la náusea. También es probable que su médico le recomiende suplementos nutricionales. Muchos centros oncológicos tienen nutricionistas como parte del personal para ayudar a crear un plan alimenticio que se ajuste a sus necesidades.
- Obtenga apoyo emocional, espiritual y psicológico. Un diagnóstico de cáncer es algo sumamente difícil. Es posible que usted se sienta aturdido, enojado, afectado, triste, asustado o abrumado. A veces podría sentir todas estas emociones al mismo tiempo. Es totalmente normal.
Hable acerca de sus sentimientos con su equipo de médicos profesionales. Su médico puede evaluar si usted sufre depresión clínica. Si procede, él o ella pueden prescribirle medicamentos o remitirlo a un asesor o profesional de la salud mental. A algunos pacientes les parece útil el apoyo de un consejero espiritual o religioso.
No olvide que un diagnóstico de cáncer de pulmón puede ser estresante para toda la familia. Sus familiares podrían sentirse igual de abrumados que usted. Los grupos de apoyo pueden ayudar a pacientes y familiares. Puede ayudar hablar con otras personas que han padecido o conviven con el cáncer de pulmón.
Muchos hospitales y grupos médicos son sede de grupos de apoyo de cáncer de pulmón. Pregunte a su equipo de profesionales médicos cuáles son las opciones cerca de usted.
Las etapas del cáncer de pulmón de células grandes son:

Etapa I: El cáncer se limita a una parte de un pulmón. No se propagó hacia ninguna otra zona.

Etapa II: El cáncer está localizado en un pulmón y cerca de los ganglios linfáticos dentro de ese pulmón, llamados nódulos hiliares.

Etapa III: El cáncer está en un pulmón y en los ganglios linfáticos entre los dos pulmones, en el centro del tórax. El término etapa IIIA describe, por lo general, al cáncer de pulmón que se expandió hacia los ganglios linfáticos del mismo lado del tórax en que se halla el cáncer, o que puede haberse extendido hacia estructuras
adyacentes, tales como las paredes del tórax, el esófago o el corazón. La etapa IIIB significa que el cáncer se propagó desde los pulmones hacia los ganglios linfáticos del
lado opuesto del tórax o por encima de la clavícula.

Etapa IV: El cáncer se dispersó hacia el espacio alrededor de los pulmones (la pleura), hacia el otro pulmón, o hacia otra parte del cuerpo, tales como el cerebro, los huesos, el hígado o las glándulas suprarrenales. En la etapa IV del cáncer puede escuchar el término “metástasis”, es decir, que el cáncer se extendió más allá de su sitio original en el pulmón hacia otras partes más distantes del cuerpo.


El cáncer de pulmón de células pequeñas tiene dos etapas:
Etapa Limitada: El cáncer está limitado a una parte del pulmón y cerca de los ganglios linfáticos.
Etapa Generalizada: El cáncer se propagó hacia otras partes del tórax o del cuerpo. Se espera que la estadificación para el cáncer de pulmón de células pequeñas pronto incluya un sistema de cuatro etapas, similar a la del cáncer de pulmón de células grandes, debido que tal sistema predice mejor los resultados.
Recursos
Para obtener más recursos sobre Cáncer de Pulmón, encontrar apoyo y respuestas a sus preguntas, visite a nuestros socios:
National Cancer Institute at the National Institutes of Health
Apoyo
Hay muchos lugares donde se puede obtener apoyo para combatir el cáncer de pulmón. Grupos locales y en línea pueden ayudarle a encontrar respuestas a sus preguntas y ofrecer asistencia. Es muy probable que su equipo de profesionales médicos conozca los grupos de apoyo en su área local. Recursos en línea:
- American Cancer Society
- American Lung Association Lung Cancer Support Groups
- The Better Breathers Clubs and American Lung Association
- Bonnie J. Addario Lung Cancer Foundation
- Lungevity Foundation
- National Cancer Institute at the National Institutes of Health
Su equipo de profesionales médicos
- Los médicos de cabecera e internistas son médicos que han completado una residencia en medicina general o medicina interna. A menudo, son los que primero detectan el cáncer.
- Los neumólogos son médicos que se especializan en diagnosticar y tratar enfermedades pulmonares. También tratan las afecciones respiratorias causadas por el cáncer o su tratamiento.
- Los patólogos son médicos que se especializan en identificar enfermedades. Usan un microscopio para observar muestras de tejido obtenidas durante una biopsia. El patólogo diagnostica el tipo de cáncer y qué tan avanzado está (su estadio).
- Los cirujanos torácicos (médicos del tórax) son médicos que se especializan en las intervenciones quirúrgicas de los pulmones y otros órganos dentro del tórax. Un cirujano torácico trata los cánceres de pulmón, esófago y la pared torácica. Algunos tienen preparación especial en el tratamiento de cáncer por medio de intervenciones quirúrgicas.
- Los oncólogos son médicos que se especializan en el tratamiento del cáncer.
- Los radiólogos diagnósticos o intervencionistas son médicos que se especializan en diagnosticar enfermedades con pruebas de diagnóstico por técnicas de imagen, como radiografía, imágenes por resonancia magnética (RM), tomografía axial computarizada (TAC), tomografía por emisión de positrones (TEP) y ecografía. Los radiólogos intervencionistas usan las pruebas de diagnóstico por técnicas de imagen para guiarse en las biopsias.
Su equipo de profesionales médicos podrían tener todos o algunos de estos profesionales médicos.
- Las enfermeras oncológicas se especializan en el tratamiento y el cuidado de personas que padecen cáncer.
- Los orientadores de pacientes son profesionales médicos capacitados y culturalmente sensibles. Brindan apoyo y orientación a lo largo del proceso de cuidados del cáncer.
- Los terapeutas respiratorios evalúan y tratan a las personas con afecciones respiratorias u otros trastornos pulmonares.
- Los trabajadores sociales hablan con las personas y sus familias acerca de sus necesidades emocionales y físicas. También les ayudan a encontrar apoyo.
- Los especialistas en dietética licenciados usan la dieta y la nutrición para mantener sano el cuerpo. Ayudan a mejorar la salud nutricional.
Preguntas que puede hacerle a su médico
- ¿Debería hacerme una prueba para detectar cáncer de pulmón?
- ¿Qué técnica se usará para diagnosticar mi enfermedad?
- ¿Podrían examinar mi tumor?
- ¿Cómo se extirpará el tejido?
- ¿Qué tan grave es mi cáncer de pulmón?
- ¿Qué tipo de cáncer de pulmón tengo?
- ¿En qué estadio está mi cáncer de pulmón?
- ¿Está el cáncer en alguna otra parte de mi cuerpo?
- ¿Necesito más pruebas?
- ¿Hay algún biomarcador en mi tumor?
- ¿Cuál es mi pronóstico?
- ¿Cuáles son mis opciones de tratamiento?
- ¿Cuáles son los riesgos y las ventajas de mis opciones de tratamiento?
- ¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de mi tratamiento?
- ¿Qué tan pronto tengo que optar por un tratamiento?
- ¿Cuánto costará el tratamiento?
- ¿Cómo puedo mantenerme sano?
- ¿A dónde puede acudir para obtener apoyo?